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Tobias Dirty

Volver la lengua una flauta

Curador Sebastian Desbats
8 sep - 30 oct, 2018

 

1
Si los coleccionistas dejaran de comprar obras y comenzaran a revender lo que
tienen las instituciones tendrían que contratar a personas para generar nuevas
sensibilidades vivas. El sistema se dividiría en tres: coleccionistas haciendo
negocios entre ellos, artistas ocupando museos y millennials trabajando para
que el acervo de los nombres ya consagrados circule en las universidades
publicas ante la fatiga academicista. Incluso algunos coleccionistas se
volverían artistas. 
2
La extorción moral implica generar situaciones dramáticas para tener acceso a
la individualidad. Ser imperceptible cuando se quiere ostentar el descuido de la
imagen propia es absurdo. Recordemos a Deleuze cuando decidió dejarse las
uñas largas para ocultarlas en los bolsillos y después se dio cuenta que los
bolsillos comenzaban a romperse. O en el primer numero de Sodoma GAG de
1984 cuando ciertos grupos gays rechazaban la posibilidad de organizar una
fiesta con shows travestis porque querían una fiesta “seria” que les permitiese
cuidar la imagen frente a los otros. Es decir, tratar de ser “naturales” y no
“locas. 
3
Entre el sujeto y su objeto cómplice explota el drama que forma la prosa, elegía
o falsete y termina apoyándose en las abstracciones del amor y el odio. Un
impulso inevitable para maquinar la desesperada necesidad de redención. El
filo negro del humor que se abandona a favor del juego paródico de la muerte
en representación del éxito como un problema o síntoma de lo privado.

Si sabes de antemano donde ubicarte en el ambiente del arte es porque
entendiste la contemporaneidad. Y el arte es saber hacer eso.
5
La noción de identidad fue inventada por la curaduría marginal para que las
empresas del multiculturalismo nos hagan creer latinos. 
6
Las pantallas por momentos se vuelven invisibles. Suceden cosas en un tono
aparentemente frio que no logra congelarse sino que queda templado y hasta
genera un poquito de ternura. Los jefes de la interfaz ayudan a tener una vida y
a decirle al capitalismo: "¡somos personas como vos!".
7
Ser atrapade por el arte es ser llevade como un sante al mercade que muere
para no morirse une misme. Si la pretensión de los proyectos es la eternidad la
emergencia constante se va a transformar en una pedagogía del TERROR. 
8
La escenificación de lo oculto se hace invisible para no perder su condición de
secreto: Una fe de un ciego.
9
Muerto vivo, blancura de muerte. Muerto resucitado. Son los conjuros mínimos
de una nota necrológica.